Características de los suelos paso rápido

Características de los suelos paso rápido

Los suelos Quick-Step son una de las opciones más populares en cuanto a suelos laminados. La marca se ha ganado la reputación de ofrecer productos de alta calidad duraderos, fáciles de instalar y mantener y con un aspecto atractivo.

No obstante, muchas personas no conocen sobre las bondades de este tipo de suelos. Aquí te proporcionamos toda la información que necesitas saber sobre las características de los suelos quick-Step.

¿Qué son los suelos Quick-Step?

Quick-Step es una marca belga que se especializa en la fabricación de suelos laminados. La compañía ha estado en el sector desde 1960 y se ha convertido en una de las marcas más reconocidas en la industria.

Los suelos Quick-Step están hechos de materiales de alta calidad. Están diseñados para imitar la apariencia de la madera, la piedra o el mármol, depende del estilo que elijas.

Por ejemplo, la tarima Quick Step Madrid es perfecta para instalar en suelos residenciales o comerciales. Están fabricadas con un material estéticamente perfecto, son fáciles de instalar y con una excelente resistencia.

Además, cuentan con una capa de protección contra las humedades. También son fáciles de limpiar y conservan una estética y color por más tiempo. Igualmente, destacan por el método de instalación, puesto que los expertos colocan una tarima flotante bajo el material. De este modo, es más versátil y silencioso para mantener la tranquilidad en el hogar.

Características de los suelos Quick-Step

Los suelos quick step son una extraordinaria opción para el hogar o los establecimientos comerciales. No obstante, es importante que conozcas cada una de sus características:

1. Resistencia

Los suelos Quick-Step son conocidos por su alta resistencia al desgaste y a los rasguños. Esto se debe a la capa superior de los paneles, que está hecha de melamina resistente y duradera. Además, tienen una garantía de hasta 25 años, lo que significa que están diseñados para durar mucho tiempo.

2. Fácil de instalar

Otra gran característica es su facilidad de instalación. Los paneles están diseñados para encajar entre sí sin necesidad de herramientas especiales o habilidades de carpintería. Asimismo, el sistema de clic patentado de Quick-Step asegura que los paneles se fijen de forma segura y permanente.

3. Mantenimiento fácil

Estos suelos son muy fáciles de mantener y limpiar. La superficie lisa y resistente al desgaste es fácil de limpiar con una mopa o un paño húmedo. Igualmente, los paneles son resistentes a la mayoría de las manchas, lo que significa que no tendrás que preocuparte por derrames accidentales.

4. Variedad de diseños

Este tipo de tarimas están disponibles en una amplia variedad de diseños y estilos, que las hace adecuadas para cualquier tipo de decoración. Así que puedes elegir entre imitaciones de madera, piedra o mármol, depende del estilo que prefieras.

5. Comodidad

Los suelos Quick-Step son cómodos para pisar y caminar sobre su superficie gracias a la capa inferior acolchada que está debajo de la capa superior resistente. Esta parte inferior no solo hace que los suelos sean más cómodos, también reduce el ruido y mejora la acústica de la habitación.

¿Cómo cuidarlos para que duren más tiempo?

Para mantener tus suelos Quick-Step en buen estado durante muchos años, es importante seguir algunas pautas básicas de cuidado y mantenimiento.

1. Para mantenerlos limpios y libres de polvo y suciedad, es recomendable barrerlos o aspirarlos regularmente. Esto eliminará las partículas de polvo que se hayan acumulado en la superficie del suelo.
2. No es recomendable mojarlos demasiado. Si necesitas limpiar una mancha o una zona especialmente sucia, usa un paño húmedo y no empapes el suelo con agua. Además, asegúrate de secar cualquier exceso de agua para evitar que la humedad penetre en el suelo.
3. Utiliza productos de limpieza suaves que no dañen la superficie del suelo. Además, evita el uso de productos agresivos como lejía o limpiadores abrasivos, ya que pueden dañar la capa protectora del suelo.
4. Asegúrate de protegerlos de objetos pesados o afilados. Usa almohadillas protectoras en las patas de los muebles y evita arrastrar objetos pesados sobre el suelo.